- La corriente friki empezó a cobrar fuerza a partir de la generación millennial y su popularidad ha ido en aumento gracias a los videojuegos y las películas taquilleras, la expansión de la astrología y el paintball
+SN.- El “frikismo” está de moda y su influencia será mayor entre las marcas y empresas de acuerdo a la valoración del experto en marketing y profesor de EAE Business School, Eduardo Irastorza, coincidiendo con el Día Internacional del Orgullo Friki, el 25 de mayo.
El origen del Día del Orgullo Friki en España está documentado, pero no tanto la evolución que ha tenido la palabra, ni el cambio de público que ha hecho suyo el vocablo en cuestión. Ahora friki es simple y llanamente cualquiera al que le guste algo; no hace falta que le guste mucho o que sea una afición o conocimiento obscuro. Basta con que le guste o lo coleccione algo; el friki de 2022 se enorgullece de ser raro por ver las películas más taquilleras del año y por escuchar la misma música e ir a los mismos sitios que absolutamente todo el mundo.
El colectivo friki empezó a cobrar fuerza a partir de la generación millennial y en la actualidad existen dos corrientes bien diferenciadas: la occidental, proveniente de los
superhéroes norteamericanos de Marvel; y la oriental, que surge del Manga japonés. Ambas tendencias conviven y se influyen mutuamente, repercutiendo de manera positiva en los resultados de las compañías detrás de productos frikis, a pesar de la crisis económica derivada de la Covid-19. Así, por ejemplo, Pokémon Company, desde 2017 acumula ejercicios fiscales con excelentes resultados, registrando ingresos de 169 millones de dólares en el 2020.
Friki es una españolización del término anglo “freaky”, que quiere decir raro en inglés. Pero que también puede ser puesto a una persona que hace cosas que no son “comunes”: quizás una actitud, un modo de vida o un estilo puede ser considerado freak. Ser friki ya empezaba a ser de todo el mundo. En 2008 ya se empezaba a escuchar “Soy friki de los gimnasios”, “Soy friki de Friends” o “soy friki del fútbol”. La distancia con los freaks del circo de finales del siglo XIX se acrecentaba. Y del orgullo de ser raro pasamos al orgullo de rebaño. La cita con la que cierra Day&Night, cortometraje de Pixar, sobre el tema dice “Miedo de los desconocido. Tienen miedo de las ideas nuevas. Están cargados de prejuicios no basados en nada real, sino basados en la idea de que… si algo es nuevo, debo rechazarlo inmediatamente, porque me da miedo. Lo que hacen es quedarse con lo que ya les es familiar. Y para mi las cosas más bellas del universo son las más misteriosas”.
El friki fue pasando de ser una persona de naturaleza curiosa a ser una persona interesada en consumir únicamente lo que ya conoce. No fueron solo los frikis; fuimos todos. Vinieron los remakes, las franquicias fílmicas, la música, los programas de refritos… Sólo en una cultura que premia la imitación, puede surgir un fenómeno como TikTok y puede aplaudir algo como el último disco de C. Tangana. “El ‘frikismo’ hoy se mide en ostentación del dinero gastado en llenar las estanterías de objetos físicos que -creemos- definen nuestra identidad» afirma Nacho Menéndez en Facebook. Lo friki empezó a molar cuando se vio que había dinero de por medio. Cuando aquellos niños empezaron a crecer, a tener un trabajo, y un gato en vez de un niño. Y donde no hay niños hay caprichos. Toda la vida del friki empezó a centrarse en el merchandising.
Para Irastorza, “el fenómeno friki es un claro síntoma de un nuevo modelo de segmentación de públicos. Hoy los criterios actitudinales se imponen a los sociodemográficos, y los gustos ya están por encima de las edades, los ingresos, la localización, el credo o la raza”. Por ese motivo, la diferencias entre los fanáticos y frikies es cada vez difusa, ampliándose a otros campos: desde el mundo cinematográfico a los videojuegos y coleccionismo, pasando por la astrología o el Paintball. “Todas las grandes marcas del inmenso y diverso sector del entretenimiento están hoy pendientes del frikismo. Desde Disney hasta McDonald’s, que creó la salsa especial Schezhuan para los seguidores de la serie Rick y Morty” afirma el experto de EAE. Así, las empresas siempre tratan de estar presentes en este ecosistema, “especialmente las marcas de juguetes como Hasbro, Lego, Mattel o Funko, que dedican más de la mitad de su inversión creativa en producciones específicas de personales de culto”.
Por ello, la venta y reventa de producciones para coleccionistas mueve decenas de millones de dólares. Los fabricantes de videojuegos viven para los frikis como early adopters y heavy users. “Los frikis son uno de los colectivos más activos en las redes sociales: alimentan y dirigen la conversación y las empresas, gracias a la tecnología y al análisis de datos” añade Irastorza. Esto es especialmente significativo en el mundo de los videojuegos, cuyas principales marcas llegan a acuerdos con sus fans para que los valoren y contribuyan a darles proyección.
En Europa y Norteamérica, se aprecia en el mundo cinematográfico por la popularidad de éxitos como Star Wars, Star Trek, Harry Potter o los infinitos personajes de la familia Marvel. De igual manera, el legado de los personajes o franquicias creados o cocreados por Stan Lee está encabezado por Los vengadores (con 4,97 billones de dólares) seguido de Spider-Man (con un legado de 4,84 billones de euros) y de X-Men, con 3,18 billones de dólares. Por ello, según Irastorza, “los frikis son parte imprescindible del espectáculo y de las productoras, y las marcas tratan de explotarlo al máximo”. Para ello, el big data tiene un papel fundamental al identificar a estos fans incondicionales y mimarlos con productos y alternativas ad hoc para ellos.
Convenciones que mueven a millones de personas
Irastorza, opina que, una vez suprimidas las restricciones por la pandemia, la vuelta a la normalidad plantea citas de festivales y encuentros. Una de las más importantes y la más antigua (comenzó en los años 60 en Michigan) es la Convención Internacional de Cómics, Comic-Con, de San Diego. A lo largo de su trayectoria, se ha celebrado en hoteles, convenciones y hasta universidades, alcanzando el reconocimiento de tipos como Sheldon Cooper protagonista de la serie Big Bang Theory. Por ello, está previsto que cientos de miles de personas con invitación previa asistan a alguno de los cuatro días del evento que tendrá lugar del 21 al 24 de julio.
Otra cita es el Comic Market, más conocido como Comiket en Tokio. Dos veces al año, más de 35.000 grupos de fans de Manga acuden a este encuentro, que equivale al 40% de todas las publicaciones anuales japonesas. En la actualidad, el Manga ha trascendido al cine, series, videojuegos, decoración, moda y street marketing. Sus aficionados se encuentran repartidos por todo el mundo. Así, por ejemplo, la última edición del Japan Weekend Madrid, reunió más de 140.000 frikis disfrazados de sus personajes favoritos, como Otakus, Crossplay (disfrazados de otro sexo) o Furries (con apariencia animal).
Para los llamados baby boomers y frikis «con clase», existe el Festival Internacional de Angulema, para homenajear a referentes como Hergé, Moebius, Eisner o Tardi. También existe el Lucca Comics & Games en Italia, que ya cuenta con más de 15.000 expositores en 30.000 metros cuadrados.
Fuente: Puromarketing.com y Medium.com