- En «Abriendo puertas», la periodista Margarita Oropeza revisó el panorama electoral junto a Eduardo Fernández (presidente del Centro de Políticas Públicas – IFEDEC) y analizó la actualidad de los servicios públicos del país con Jesús Armas (director de Monitor Ciudad) y Glennys González (presidenta de la Fundación Siudad)
EDUARDO FERNÁNDEZ
+SN.- El abogado y politólogo, Eduardo Fernández, dejó clara su postura ante la decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de retirar la invitación de veeduría a la Unión Europea (UE), así como el anuncio de que el Estado colombiano tampoco enviará observadores a los comicios del 28 de julio: «todavía puede ser que el Consejo Nacional Electoral de repente se ponga inteligente y revoquen esta revocatoria y entonces venga la Unión Europea (…). En el caso de Colombia lo mismo (…). Me parece que este anuncio del presidente del Consejo Nacional Electoral no es buena noticia».
Fernández también consideró que «ya el proceso está bastante viciado, porque cuando en unas elecciones hay candidatos que han sido inhabilitados sin fórmula de juicio, ya eso es un vicio. Cuando en un proceso ha habido partidos políticos intervenidos judicialmente sin que hayan tenido derecho a la defensa, eso también. Cuando en la elaboración del tarjetón electoral se eliminan tarjetas arbitrariamente, eso también vicia el proceso». Sin embargo, expresó su deseo de que «de aquí al 28 de julio el proceso se mantenga con la mayor decencia, la mayor transparencia y el mayor respeto al procedimiento (…). Todos los venezolanos debemos ejercer nuestro derecho y cumplir nuestro deber de participar en el proceso para escoger al próximo presidente de la república».
El máximo representante del IFEDEC informó que desde esa organización insisten en que «hace falta un gran acuerdo nacional (…), donde entre otras cosas haya un estatuto de garantías para todos los actores del proceso, de modo que todos se sientan seguros de que se van a respetar los derechos de cada uno».
Fernández habló sobre el candidato de la MUD, Edmundo González Urrutia, resaltando que era «una fórmula magnífica porque es un hombre de un lenguaje equilibrado que llama a la unidad de los venezolanos. Ya basta de pleitos inútiles. Hemos perdido los primeros 24 años de este siglo XXI en una peleadera absurda que lo que nos ha traído es retrocesos, miseria, pobreza, deterioro económico».
Sobre la intención del voto supera el 70 %,que según algunas encuestas, el politólogo recordó que «todos tenemos el deber de participar en estas elecciones. Lo que se está jugando es demasiado importante (…). Tenemos la gran oportunidad de lograr un cambio y lo que nos piden es nada más que ir a votar. De modo que yo los invito a todos. Todos tenemos que participar, todos tenemos que votar».
En relación a los candidatos presidenciales, dijo: «creo que deberíamos entender que hay dos candidatos: el señor Maduro –que ofrece continuar las políticas que han venido aplicando en los últimos años- y el señor Edmundo González Urrutia –que es el que está en mejores condiciones de acuerdo con todas las encuestas para lograr el cambio-. Por razones de economía del voto, todos los electores entendemos que independientemente de que haya otros nombres circulando por ahí, es o Maduro o Edmundo».
Fernández también reafirmó su discurso de que se debe instalar un gobierno de amplia base. En concreto, manifestó que «hace falta un gran acuerdo para sacar a Venezuela del atraso. Ahorita estamos con una economía muy enferma». Agregó que el IFEDEC propone un programa mínimo para recuperar la economía del país: «primer punto; respeto a las elecciones, respeto a los resultados, nada de fraude (…). Segundo; fortalecer la institucionalidad democrática. Tercero; reactivar la economía (…). Luego mejorar los servicios públicos (…) y erradicar la corrupción».
Sobre cómo puede la comunidad internacional ayudar frente a la situación que vive el país, el experto puntualizó: «en la comunidad internacional, por ejemplo, están los organismos financieros internacionales (…). Esos organismos tienen los riales que necesitamos para que haya electricidad en Venezuela (…). Yo recomendaría: vamos a entendernos con estos organismos internacionales para que den los créditos«.
Consideró que junto a eso debe haber un «refinanciamiento de la deuda externa» para lo que considera trascendental «descubrir cuánto es que debemos (…). Con la información que tengo, la deuda del Estado venezolano debe estar en el orden de los 150.000 millones de dólares. A eso hay que agregarle la deuda de PDVSA; y a eso habría que agregarle algunos temas pendientes de litigio (…). De modo que hay una deuda externa en el orden de los 200.000 millones de dólares (…). Hay que refinanciar la deuda. Felizmente, Venezuela tiene con qué respaldar un refinanciamiento».
Fernández también habló de la propaganda electoral, afirmando que «el ventajismo del gobierno es muy descarado. El monopolio de los medios públicos de comunicación social es increíble; todos los medios del Estado están al servicio de los intereses políticos del gobierno. El gobierno atropella los derechos de los ciudadanos».
MESA DE ANÁLISIS
Jesús Armas y Glennys González dedicaron la mesa de análisis a abordar las fallas en los servicios públicos como el agua y la electricidad; que tienen gran responsabilidad en el ámbito político. «Los servicios públicos pasaron a ser un indicador muy importante de cómo ha disminuido la calidad de vida en todos los hogares venezolanos», dijo González.
Por su parte, Armas añadió que «el servicio peor evaluado de todos es el servicio de la electricidad. El 70 % de los venezolanos califica este servicio como malo o muy malo». Asimismo, aseguró que «el parque eléctrico en general está funcionando al 60 % de su capacidad, o probablemente menos«. En cuanto al servicio de agua, González explicó que «si hoy en día se contara con el mantenimiento de todo ese sistema podríamos tener la capacidad que se requiere».
Los expertos indicaron que el estado donde los venezolanos perciben el agua de peor manera es Carabobo. «Pero la verdad es que en todo el país el agua es totalmente insegura porque no están los químicos. Las plantas de tratamiento y de potabilización no están funcionando a la capacidad que deberían con los requerimientos que establece la ley (…). El agua hoy que llega a nuestros hogares no se garantiza que sea potable«, sentenció Armas.